Salud: Periodista Manuel Alejandro Flores Fernández

Cada 17 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Prematuridad, una fecha destinada a resaltar la relevancia del cuidado especializado y humanizado de los bebés que nacen antes de término.


Este año marca un hito histórico, pues la Asamblea Mundial de la Salud lo ha incorporado oficialmente al calendario de la Organización Mundial de la Salud (OMS).


El lema de 2025 resume su esencia: “Dar a los bebés prematuros un comienzo fuerte para un futuro brillante.”


Según la definición establecida por la OMS, se considera prematuro a todo recién nacido que llega al mundo antes de completar las 37 semanas de gestación. De acuerdo con la organización internacional March of Dimes, dedicada a la salud materno-infantil, las causas del parto prematuro son múltiples. Entre los factores que elevan el riesgo se encuentran enfermedades crónicas como hipertensión o diabetes, así como infecciones del tracto urinario o reproductor. También influyen los embarazos múltiples, los intervalos cortos entre gestaciones y los embarazos no planificados.


Factores psicosociales (como el estrés o las condiciones socioeconómicas desfavorables) pueden incidir de forma significativa en la aparición de nacimientos antes de término.


March of Dimes subraya que en aproximadamente el 50 % de los casos no se logra identificar una causa específica, lo que refuerza la necesidad de fortalecer la atención prenatal y la educación comunitaria (March of Dimes, World Prematurity Day Fact Sheet, 2024).


Consecuencias del nacimiento prematuro

Los bebés que llegan al mundo de manera anticipada enfrentan mayores riesgos de complicaciones respiratorias, neurológicas y de desarrollo, así como posibles discapacidades visuales o auditivas.


Según la OMS, las complicaciones derivadas del parto prematuro son responsables de más del 18 % de las muertes en menores de cinco años a nivel global (Global Health Observatory Data, 2023).


El impacto no se limita al ámbito médico: las familias suelen enfrentar altos costos emocionales y económicos, debido a los cuidados intensivos prolongados, el seguimiento médico constante y la necesidad de apoyo psicosocial.

Prevención y tecnología: aliados por la vida


La atención temprana y especializada puede marcar la diferencia. Cuidar la salud materna incluso antes del embarazo es esencial para prevenir complicaciones. El control prenatal regular constituye una de las herramientas más efectivas para reducir los partos prematuros, ya que permite detectar señales de riesgo y actuar de manera oportuna.


Los avances tecnológicos han transformado las perspectivas de supervivencia. Hoy, gracias a la innovación médica, muchos bebés que antes no habrían logrado vivir pueden crecer y desarrollarse plenamente.


En Meditek se trabaja de la mano con hospitales y clínicas para fortalecer las unidades de cuidados intensivos neonatales mediante soluciones tecnológicas de vanguardia que resguardan la vida y el bienestar de los recién nacidos.


La compañía ofrece tecnología de última generación, incluyendo incubadoras neonatales de alta gama, dispositivos de fototerapia y sistemas de monitoreo continuo que abarcan el cuidado materno fetal y neonatal. Todo ello contribuye a fortalecer un modelo de atención centrado en el neurodesarrollo. Asimismo, impulsa la formación y actualización de los profesionales de salud en el manejo de estas herramientas diseñadas para atender a una población tan frágil como valiosa.


Cuidar al bebé empieza con cuidar a la madre. Evitar el tabaco, el alcohol y el estrés reduce significativamente el riesgo de parto anticipado. Una alimentación equilibrada, rica en hierro, calcio, ácido fólico y proteínas, contribuye al desarrollo saludable del feto. Es vital mantener bajo control las enfermedades crónicas, dormir lo suficiente y realizar actividad física ligera, como caminar o practicar ejercicios prenatales bajo
supervisión médica.


Por último, se recomienda espaciar los embarazos, esperando al menos 18 meses entre un parto y otro, para permitir una recuperación adecuada del cuerpo y asegurar mejores condiciones para el nuevo embarazo.